Parece pueblo fantasmaaa

Después de muuuuchos años, recordé que tenía este blog activo. Casi lo desaparezco (qué fácil es borrar las cosas en en mundo de la informática, me pregunto porqué no puede ser así con los problemas de la vida real), pero me arrepentí y decidí que tal vez me animaba a redactar algo nuevamente. Y acá estoy.
Han pasado los años, aumentado los hijos, las grasas, las canas, pero en esencia, sigo siendo yo.
Miranda se llama la nueva (ya no tanto) integrante de esta familia. Es una mini me, pues es idéntica a mi cuando tenía su edad (5) , aunque creo que más bonita y mucho más inquieta. Carlangas ya ad portas de los 10, un cabro chico muy rico.
Ahora me dedico a hacer cosas ricas (aprate de los hijos y de las cosas que practico en la intimidad de mi habitación) entre las que se encuentran las tortas, cupcakes y galletas y me va bien, son siempre un éxito. Ahí les dejo unas fotos de mi arte.


Antes de seguir escribiendo, me gustaría saber si a alguien le llegan mis palabras, porque de lo contrario, estaré como los locos, que en vez de hablar solos, escribo para que nadie me lea.

Cómo ha pasado el tiempo!!!

Desde que escribí la última vez, ha pasado más que agua bajo es puente. Mi vida ha dado varios giros, ahora no sólo está Carlitos, sino que otra luz ilumina mi vida: Miranda. Ella es un encanto, bella como ninguna, loca como ella sola. Estamos en otra casa, esta vez la compramos y Cristián está estudiando en Santiago.
La experiencia crece, y eso no es que me esté poniendo más vieja, sino que uno aprende a vivir la vida de otra manera. Mis amigos siguen siendo los mismos, aunque ahora tengo otros nuevos.
Ahora como he vuelto, amigos lectores (si es que me queda alguno), me van a tener que leer todas las leseras que quiera escribir. Bueno, si quieren hacerlo, yo tengo toda la libertad del mundo para escribir lo que me de la gana.
Sigo siendo la misma, más regia, menos enojona, más enamorada. Me sigue gustando el sushi y eso que ustedes saben que me gusta.
Estoy muy buena para los trabajos manuales (esos también) relacionados con las artes.
Ya me dio lata, a ver que se me ocurre luego.

Al jardin!!!

Carlitos ya entró al jardín. Qué rápido ha pasado el tiempo!!!! Está en el Crepito, o (de)Crépito. Se ve más lindo con su buzo ... Y aunque no pago una fortuna, es bien caro esto de los jardines. Hay que considerar que tenemos que comprar el uniforme y la inmensa lista de útiles escolares que ya les piden. Que cartulinas, que confort, que nova, que plasticina, que papel lustre, craf, témperas, son algunas de las cositas que aparecen.
Los primeros días, Carlitos lloraba cuando lo iba a dejar, pero de a poco se acostumbró y ya es uno de los regalones del nivel (medio menor), hasta podría decir que es de los más chiquititos.
Nosotros estamos felices de su incorporación, ya está hablando más, se sabe el nombre de las tías y se despide de sus amiguitos del curso.
Es muy importante que los niños puedan compartir con seres de su edad, así sabrán que existen otras personitas que tienen sus mismas inquietudes y requerimientos, además de que con amigüitos de su misma condición, aprenden a conocer el mundo desde una perspectiva infantil, como si de verdad estuvieran descubriendo el mundo.

¿Inteligencia emocional?

Cada vez que me topo con alguien a quien le pasan cosas terriblemente tontas, me pregunto si es que ese alguien carece de inteligencia emocional. Hay personas que son sumamente hábiles, intelectualmente hablando, pero no cuentan con un dominio de su vida cotidiana. De las situaciones que nos rodean y que nos complican la existencia.Lo peor de todo es que ela inteligencia intelectual, que se relaciona con el éxito académico y laboral, no lo es todo en la vida, la inteligencia emocional, según el señor Goleman, nos ayudará a desenvolverse mejor en la vida y lo que nos permitirá que nuestro intelecto triunfe.¿Será que las personas carentes de inteligencia emocional son muy inmaduras, poco evolucionadas? Yo no considero ser la más top de todos, pero trato de hacer las cosas de la mejor forma. Determinando cuál es el camino más correcto para lograr mis objetivos, el que menos me va a costará atravesar, el que nos brindará mayor satisfacción, etc. Este es un mensaje para todos aquellos que no despietan del letargo, para todos los que hay que cachetear para enderezarles el camino, para los que siguen viviendo a costa los padres, para todos los que no saben lo que es sacarse la cresta para lograr una satisfacción personal.

Uffff!!! Casa nueva...

¿Quién dijo que cambiarse de casa era entretenido? Puro trabajo es como mejor se define.
Claro que el cambio nos sifnificó hartas cosas positivas. Estamos en una casa más grande, duplicamos todo el número de piezas y baños, aparte que hay patio y antejardín. Aunque hay que preocuparse de barrer los patios, mantenerlos, regarlos ... Y eso es sólo el patio. Ahora hay un segundo piso que hay que ordenar, una escalera de la que hay que tener mucho cuidado, porque Carlitos, que es más resbaloso que el aceite, la sube y baja a cada rato.
Otro punto positivo, estoy al lado de mi Nana Betty, mi abuelita, y ella es re buena onda. Además no tengo que andar cargando con el coche de arriba para abajo; ahora, si quiero salir a comprar, meto en el coche a Carlitos y se me acaba el show.
Cristian también está re contento, nunca había vivido en casa, siempre en depto. El pobre no ha podido hacer su asado eso si, pero pronto vendrá.
Del cambio de casa, en sí, ni hablar. Los de la mudanza casi me estropearon todos los muebles, los descriteriados esos. Mi sillón africano está saltado, el refrigerador tiene una hendidura, mi secretier tiene rayones y un mueble de cocina tampoco se salvó de sus manos de hacha.
Con todo esto, espero no cambiarme en unos cuantos años más, ojalá a una casa que sea la definitiva, la popularmente llamada "casa propia".

Se fue la negra!!!

Cuando un amigo se vaaaaaaa
queda un espacio vacioooooo....!!

Mañana la Paula se va a Francia, bueno, en realidad vuelve a Francia. Estuvo en Chile unos tres meses. Quien iba a pensar en que esa negrucha iba a crecer tanto en un par de años. Se extraña la negra, es muy buena onda, en su onda siempre, así la queremos.
Somos amigas de chica, junto con la Marce, la Pachi, la Caroline y yo, por supuesto. Tantas huevadas que hicimos juntas, tantos ratos entretenidos que pasamos en su casa, jugando a "las cositas de armar", claro, hasta que a ella se le ocurría ir a cagar al baño y como no quería que yo supiera que todavía le limpiaban el poto, me pedía que me fuera de su departamento y que volviera más tarde. Y como las tías dicen que yo era muy requetecontra pilla, yo ya había descubierto su gran secreto.
Hay esta Paula, que tan mal la pasó con ese gringo viejo. Mírelo que venir a humillar a nuestra amiga, que no por ser Papalapapiricoipi me la van a venir a tratar mal.
Aunque siempre despues de la tormenta sale el sol, a la Paula en Paris le cambió la vida. Si hasta pinche (s) le salió, encontró pega, se hizo de buenos amigos y juntó plata para venir a ver a sus madres, la tía Sandra y la Yiyi.
UN MENSAJE A PAULITA: Sigue tu rumbo, eres feliz allá, es lo que siempre has querido. Y como todo el mundo te lo ha dicho, acá tienes a tu familia y tus amigos que te quieren y siempre te esperaremos con los brazos abiertos (algunos seguro que esperarán que tu regreses con otras cosa abiertas, jajaja).
Y así como algunas se van, otras nos quedamos, con nuestras alegrías y bajones, pero atinando que hay que seguir tirando pa'rriba, disfrutando de los placeres que nos da este estrecho, pero largo país.

De Vaca .... ciones!!!

Las vacaciones ya se fueron. Estuvimos en Quintero, lleno de flaites como dicen los lolos de ahora. Nos alojamos en un hotel que tiene el diario en ese balneario, piolita, familiar, relajado. Buena comida, ricos tragos, gente amable.
Con el Cristian y Carlitos partimos a veranear con mi mamá y mi abuela. Suena freak, pero ellas son buenaonda.
Estuvimos una semanita tirados de guata al sol en las distintas playas del litoral. No se salvó de nuestro quitasol Maitencillo, Horcón, Ritoque.
Aunque el presupuesto no fue muy extenso, nos pegamos una rica comilona en Horcón, con hartos mariscos. Lo mismo puedo decir con el copete, donde el barman del hotel hacía unos tragos macanudos.
Un punto negro: bajo el hotel, en la playa todas las noches llegaban a tocar guitarra a la arena, a tomarse unas chelas y fumarse unos cogollos. Los gritos no nos dejaron dormir las primeras noches, luego ya las hicimos parte de la fauna y fueron imperceptible por nuestros oidos.
Sin duda el que mejor la pasó fue Carlitos, quien se bañó y jugó con arena como chancho en barro. Adoraba las olas, se sentaba en la orilla a esperar que llegara el aguita. Lo malo es que se llenó de grantios y la dermatóloga que tuvimos que ir a ver de urgencia a Viña nos dijo que era piel seca que con el sol se había resecado más. Eso no fue impedimento para que Cotino disfrutara de los encantos marinos.
El Cristian cumplió su deseo de ir a pescar, aunque el pasatiempo no duró más de media hora, ya que al cabo de ese rato y al no sacar nada, agarró su caña y nos fuimos pal hotel.
Lo peor de todo fue tener que volver a la dura realidad de nuestro Quilpué querido. Aunque cuando estábamos en casa, volvimos a ser felices: nuestra camita y nuestros ruidos eran los de siempre.